¡Eres libre de tu enfermedad!

La actitud compasiva de Jesús

Siempre encontramos algo maravilloso en la Palabra de Dios, quienes tienen fe, esperanza y mucho deseos de amar reciben con agrado esta líneas de reflexión. Estas son solo pautas que
le puede ayudar en su reflexión personal y tal vez compartir a alguna persona quien lo necesita.

¿Ha pasado usted muchos años pensando en alguna carga que no puede dejar? ¿enfermedad, deudas, problemas o fracasos en la vida?. ¿Ha sido marginado por su condición?, tal vez¿despedido de su trabajo por su condición física?.

Quiero resaltar este relato ubicado en Lucas 13, 10-17, un evangelio que siempre hace notar la presencia de la mujer en este caso se trata de una mujer encorvada que no podía enderezarse hace mas de 18 años.

Primero entendamos a esta mujer en su propia realidad judía. Cualquier enfermo de este tipo era discriminado, no solo por su condición fisica sino también por su "religiosidad", digamos asi. ¿Por que? porque los judíos siempre pensaban que cualquier enfermo estaba en esa condición a causa de sus pecados. Recordemos que su sociedad se normaba por las leyes de Moisés. Seguramente el ánimo de la mujer al entrar en la sinagoga no era bueno, tal vez no pensó atraer la atención de alguna persona. Ella acostumbraba ir a la sinagoga como los demás. Pero ese día Jesús la VIÓ y la LLAMÓ. Todas las demás personas no la tomaron en cuenta. Aqui va nuestra segunda observación, Jesús SI la VIÓ Y LA LLAMÓ. No la ignoró como suele suceder en cualquier sociedad ausente de misericordia y amor.
Esa actitud compasiva de Jesús es el inicio de un gran milagro. Jesús simplemente dice: "Mujer, eres libre de tu enfermedad", una afirmación que la llena de fe y esperanza. Una declaración que la libera, seguramente de su enfermedad y de todo el desánimo que tenía encima. Su actitud al ser sanada fue de "glorificar".
Nos imaginamos llena de emoción y de alegría. El milagro de Jesús fue completo, la conectó con Dios, le devolvió las ganas
de vivir. le quitó todo el peso de su enfermedad y todo loque ello significaba.
¿Hay muchas personas a mi alrededor que necesita ser liberada?¿hay mucha gente a mi alrededor que tiene muchas cargas en su vida y que no puede liberarse? ¿cuál es nuestra actitud cuando nos topamos con ellas? o ¿no las vemos?.
El mensaje de Lucas es pertinente también en nuestra sociedad y nos toca a todos nosotros. Si vivimos en una ciudad grande, el afán de cada día nos distrae y no nos detenemos a pensar en la otra persona.
Por otro lado, también nos invita a pensar que Dios esta pendiente de nosotros, el quiere liberarnos de nuestras cargas, nuestras heridas, nuestros dolores y sufrimientos de cada día que se acumulan en años. Confía en él, pero también sé participe de ese milagro hoy mismo.

Paulo Llanco
Pastor

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